viernes, 14 de junio de 2013

Ensayo a partir del resumen de un final.

Hola querido lector! Aquí te dejo un breve ensayo. Es de esas cosa que deben simplemente salir de la mente  y transformarse en letras. De nuevo disculpa las muletillas y repeticiones. Espero que encuentres en el algo que llevarte, no una enseñanza, una idea que te entretenga quizá... Nos vemos a la próxima.

Desde hace mucho que vengo tratando de terminar con una relación. Con ese algo que al final no se dio. Es mucho estar dando lata con lo mismo. Creo y en verdad espero estar un pasito mas allá de la delgada linea que marca la salida del laberinto. Es por eso que ahora me atrevo a escribir estas lineas, por que necesitan salir. Por que en ningún momento las volveré a decirlo tan honestamente como ahora. Así pues, que acá las dejo para perjuicio o beneficio de aquel que se aventure a leerlas, a sabiendas de que serán, en el mejor de los casos, veneno para sus heridas.
Me pregunto una y otra vez el ¿por que no te dejo ir?. Dicen que te supere, que la vida sigue y que encontrare otro amor, igual o mejor que el tuyo. Algunos hasta dicen que no eras tan bueno para mi, que no me convenías, que ya se veía venir. Algunos(los mas piadosos) sugieren que quizá he sido yo quien estaba mal, que no era yo para ti, que el agua y el aceite no se mezclan. Escucho todas y cada una de las intervenciones, pongo la cara conveniente, dependiendo de la insinuación o franca acusación. Contesto, si. Contesto lo que esas personas quieren oírme decir: Que lo superare. Que estoy bien, que si, en efecto las cosas así tenia que ser.
Pero por dentro... por dentro es otra cosa. Pareciera que por mi ser hubiera pasado un huracán que solo ha dejado devastación a su paso. Todo es un maldito desorden. El caos reina a plenitud, donde nada parece cierto. No se que creer, mucho menos se diga del que hacer. Así que navego entre los escombros que quedaron. No trato de rescatar nada, ni de reconstruir nada. Solo navego...
Floto en el limbo, tratando de no pensar en lo que paso, en lo que se dijo, ni en lo que NO se dijo. Esa parte ya la pase y solo me llevo a la auto compasión, a las llamadas furtivas, a los reclamos, a la irritante frustración... Así que solo navego.
Me cuesta casi todo mi esfuerzo el concentrarme en no pensar, o bien, me escondo tras otras cosas que me impiden pensar mas alla de lo que estoy haciendo. Pero esa estrategia tampoco funciona, por que cuando menos lo espero de la nada llega un recuerdo, una anécdota, un olor, una canción que me recuerdan a ti y es la gota que derrama el vaso para que todo esto vuelva, me derribe, me arrolle otra vez. Por que  a veces pasan cosas que se, que solo tu entenderías. De esas veces en que escucho algo y se que solo a ti te lo podría contar, que solo tu lo verías como yo lo veo. Justamente de esas veces en que necesito enterrar mi rostro otra vez en tu pecho y llorar, solo para sentir que estoy a salvo. Esos dias en que necesito un consejo, que traducido seria: que me digas lo que ya quiero hacer. Todos aquellos momentos en que quiero solamente despotricar, ser malvada, malagradecida y cruel con todos, estar amargada solo por que si... Cuando solo quiero dejar salir tantito esa pequeña misantropia que llevo dentro, esa que solo tu sabes acariciar. Esa que solo tu ves su salvaje belleza y encima de todo te gusta...
¿Para que me revuelco en el fango de la conmiseración, trayendo a mi cada pagina del libro, que finjo querer cerrar?. Es ahí donde me digo:¿ por que diablos tengo que olvidarte?¿ Por que creer que es tan fácil olvidar lo mejor de mi vida? ¿ Por que maldita sea, tuvo que ser asi? Asi prosigo con la eterna lista de por qués, que no me llevan a nada mas lejano o cercano de donde estoy.
Es justo aquí donde necesito a rabiar abrazarte de nuevo para decirte: Te ame tanto que aun duele. Creí en ti tanto, que deje de creer en y por mi misma. Te ame tanto que aun te amo y creo que lo haré hasta que me muera, aun cuando ame a otro tanto o mas que a ti.
Pero nada de esto puedo, debo o quiero hacer. La vida sigue su curso, los días se amontonan. Parece que la vida nos deja atrás, pero en realidad nos lleva con ella a otro lugar, donde viven las mismas personas, pero que cuentan nuevas historias y me rio con ellos, lloro con ellos y de pronto: Tu ya no estas aqui, solo eres el eco de algo que duele cada vez que respiro, pero a pesar de ello... puedo respirar.

2 comentarios:

chocolate senxual dijo...

las despedidas son dolorosas, no importa a quien o a que le estes diciendo adios, siempre cuesta un monton soltar, algo que a mi y a mucha gente que he visto le a ayudado, aunque en un proceso largo, no es hacer una lista de por que's sino mas bien un para que... un para que te dara muchas mas respuestas verdaderas que los constantes por que, que solo ayudan a flajelarnos con lo que no paso ni pasara. El problema siempre sera poner en manos de otro nuestra felicidad, cuando el unico responsable de quien somos, como nos sentimos, y como vivimos somos nosotros mismos, yo soy unica responsable de si soy feliz o me kiero morir, pero eso ya lo sabes.

creo q a todos nos a pasado alguna vez algo similar, pero como bien dices, seguimos respirando, es cuestion de encontrar adentro lo que se busca afuera.

bussy dijo...

En efecto, tuve que vivir este proceso y dar con las claves por mi misma. Este es del tipo de enseñanza que no se experimenta en cabeza ajena. Lo escribi para sacarlo de mi sistema, pensando en mi y otras tantas historias que anda por ahi. Por mi parte al ponerlo en letras lo he dejado por descontado. No es un ciclo cerrado, se que algun dia tendre que lidiar con el, pero por ahora es tiempo de seguir adelante. Gracias chocolatito x venir a leerme.